Reseña: Percy Jackson y el mar de los monstruos

Hoy os traigo la reseña de "Percy Jackson y el mar de los monstruos", la segunda parte de la saga que actualmente estoy leyendo y de la que ya reseñé la primera parte aquí 

Título: Percy Jackson y el mar de los monstruos

Título original: Percy Jackson and the sea of monsters

Autor: Rick Riordan 

Saga: Percy Jackson y los dioses de Olimpo #2

Editorial: Salamandra

Nº de páginas: 256

P.V.P: 12, 50

Sinopsis

Desde que sabe que es hijo de un dios y una mortal, Percy Jackson espera que el destino le depare continuas aventuras. Y su expectativa se cumplirá con creces. Aunque el nuevo curso en la Escuela Meriwetger transcurre con inusual normalidad, un simple partido de balón prisionero acaba en batalla campal contra una banda de feroces gigantes. A partir de ahí las cosas se precipitan: el perímetro  mágico que protege el campamento Mestizo es destruido por un misterioso enemigo y la única seguridad con que contaban los semidioses desaparece. Así, para impedir este daño irreparable, Percy y sus amigos inician la travesía del temible Mar de los Monstruos en busca de lo único que puede salvar el campamento: el Vellocino de Oro.

Opinión personal

AVISO: Es posible que esta reseña contenga spoilers del libro anterior sigue leyendo bajo tu responsabilidad

Tras una semana de leer su primera parte, os traigo la reseña de la segunda parte de esa saga que todos deberíamos leer una vez en la vida.

Después de haber conseguido salvar a la humanidad de una posible Tercera Guerra Mundial consiguiendo Percy devolverle el rayo a Zeus, los problemas no han hecho más que empezar. A pesar de que no se quiere pensar en ello, casi todos saben que el poder de Cronos está aumentando y que su regreso sucederá tarde o temprano y algo que sustenta aún más ese futuro es lo que le pasa al campamento mestizo en estos días. El árbol de Thalia, hija de Zeus y cuyo espíritu protegía el lugar de monstruos y peligros para los mestizos, ha sido envenenado y la magia que proyectaba se ha perdido. El campamento no es ahora un lugar seguro. Cuando Percy llega después de sufrir un ataque en su nuevo colegio, se entera de que Quirón tiene que abandonar le campamento acusado de haber envenenado el árbol y aunque sepa con total seguridad que el es inocente y que jamás le haría daño a ese árbol, no puede demostrarlo. Sus días en el campamento ya no son iguales, un nuevo entrenador está haciendo la vista gorda y propone hacer ejercicios que alguien en su sano juicio no haría hacer cuando los monstruos están acechando y atacando en cualquier momento. Percy sabe que el campamento debe de ser salvado y, junto con Annabeth y su nuevo amigo cíclope, Tyson, no tardarán en poner rumbo al lugar donde se encuentra lo único que podría salvar a Thalia: el Vellocino de Oro. Percy sabe donde está, sus sueños con Grover, su amigo sátiro que se embarcó en la aventura para encontrar a Pan, le han mostrado que está preso justo en la isla a la que necesitan ir, pero innumerables monstruos y peligros los está esperando. El Mar de los Monstruos no es apto para aquellos que quieren hacerse los héroes y, cuando no tienen más remedio que entrar allí para hacerse con el Vellocino, los tres sabrán muy bien a que se enfrentarán. Sin embargo, una fuerza mayor está despertado y cada día empieza a recuperar algo de ese poder, uno que podría acabar con todo lo que los Dioses han construido hasta ahora. Mentiras, nuevas pruebas y el fantasma de una profecía volverán a poner en prueba a nuestros personajes que, probablemente, no sepan que su nueva misión podría dar significado a otro plan más oscuro.

La ambientación sigue siendo increíble y me fascina la facilidad de Riordan para que aprendas mitología mientras lees el libro, pues en esta segunda parte no estamos exentos de las clases de mitología y aprenderemos sobre los mitos de Polifemo, Barbanegra y hasta el increíble mar de los monstruos, también me encanta como consigue mezclar la realidad con la ficción para que, por ejemplo, te parezca lo más normal del mundo que el mar de los monstruos se encuentre en el Triángulo de las Bermudas.

Percy sigue tan divertido como siempre y su sentido del humor sigue siendo uno de los puntos fuertes del libro, además se nota que ha pasado un año porque ha madurado un poco, ya no piensa tanto como un crío y se ha adaptado mejor el mundo que se abrió ante él, y aunque algunos monstruos consiguen engañarlo, más veces serán las que él los engañe a ellos. Es aún más valiente que en el anterior libro y no le importa enfrentarse a los monstruos aunque lleve todas las de perder. Sigue sin buscar el mérito o ser aclamado como un héroe por todos.

"Si salíamos vivos de aquel lío, le reconocería a Annabeth que era genial." 

Le sigue dando muchas vueltas con respecto a su padre y le asaltan demasiadas dudas, llegando a pensar que lo de ser hijo de Poseidón es tan sólo una broma pesada. 

Annabeth sigue siendo esa chica inteligente que salvará a Percy tantas veces. Cada vez se va abriendo más y la conocemos mejor pero el pasado es un auténtica carga para ella y le pesará mucho durante todo el libro además de acarrearle un par de problemas. Al principio, se muestra muy reacia a viajar con Tyson porque el pasado no se lo permite pero poco a poco acabará aceptándolo y hasta le caerá bien. Tendrá un par de discusiones fuertes con Percy, además de sus divertidos rifirrafes. 

"¡Oh, dioses Percy! Eres imposible!

Grover pierde mucho protagonismo en esta segunda parte porque se ha ido a buscar al dios Pan y toda la información que tenemos de él procede de los sueños de Percy hasta el cuarto final en el que volverá a aparecer.

- Es una mala idea. 

                  - Si no sabes lo que iba a decir.

Conocemos mejor a Clarisse y a Luke, aunque el autor no saca de él todo el potencial que podría, creo que quiere usarlo en los siguientes libros.

 Clarisse sigue siendo la abusona que se nos presentaba en el primer libro, pero es una líder perfecta que nunca se rinde y una guerrera incansable, comprenderá que si quiere triunfar en su misión debe dejarse ayudar por Percy y Annabeth.

Luke sigue estando del lado de Cronos, intentará matar a Percy en varias ocasiones y conseguir el Vellocino de Oro. Percy intentará hacerle entrar en razón y que se una a ellos, que se una al bien.

En este libro se introducen dos nuevos personajes: Tártalo y Tyson.

Tártalo es el nuevo director de actividades del campamento mestizo que está furioso por el castigo que le impusieron los dioses y que cumple perfectamente su función de caerle mal a todo el mundo.

Tyson es el único amigo que Percy hizo durante su estancia en la Escuela Meriwetger y que resulta ser un cíclope bondadoso, risueño, alegre y muy protector. Ha sufrido mucho por culpa de la gente y suele tener miedo. Pero si sus amigos están en peligro y se enfada, más te vale no encontrarte cerca de él.  Es muy inocente y habla y se comporta como un niño de 5 años. Personalmente, es un personaje que no me acaba de convencer y que, a mi parecer, sólo interrumpía la historia aunque al final me haya terminado pareciendo adorable y también me acabará gustando, al igual que a Annabeth.

Conocemos a un nuevo dios que es Hermes, el dios de los mensajeros, viajeros, ladrones, caminos y mercantes. Es uno de los dioses que mejor comprende a los mortales y le entregará a Percy un mensaje de su padre y un par de regalos para ayudarle en su aventura. Además intentará que Luke cambie de opinión y que vuelva al Campamento Mestizo, para lo que le pedirá ayuda a Percy.

Mi querido joven primo, si hay una cosa que he aprendido a lo largo de los eones, es que no puedes renunciar a tu familia, no importa lo tentador que ellos lo hagan. 

El ritmo sigue siendo igual de trepidante que en la primera parte y la pluma de Rick igual de adictiva.

Los giros argumentales son todavía más impresionantes que en el primer libro y el mayor se produce en la, literalmente, última frase de la novela y vuelve a cambiar totalmente tus sospechas de lo que pasará en el siguiente libro.

Romance, sigue sin haberlo porque tienen 13 años escasos, pero los lazos entre Annabeth y Percy se van estrechando y en alguno de los siguientes libros es probable que lo haya.

Quizás en un principio te pueda parecer similar a Harry Potter, un niño que descubre que no es lo que creía ser, al que se le abre un mundo nuevo y que junto con sus dos amigos vive aventuras. Pero no se parecen en absoluto y en este libro queda todavía más clara esa diferencia.

Esta saga sigue plagada de acción en todo momento, sin ninguna página de relleno y sin nada innecesario, ni descripciones ni diálogos ni nada. Lo justo.

¿Has leído este libro o algún otro de la saga? ¿Qué te ha parecido? ¿Te gusta la forma de escribir de Rick Riordan? Espero tus comentarios más abajo :)